¿Son convenientes las gafas de sol para niños?

Los padres cada vez estamos más concienciados de la importancia de proteger la piel de nuestros pequeños de los rayos solares. Cada año por estas fechas vemos numerosas campañas en este sentido, porque las consecuencias de una inadecuada exposición al sol puede incluso derivar en el peor de los casos en un cáncer de piel. Sin embargo, ¿qué pasa con los ojos? ¿Os habéis preguntado alguna vez por las consecuencias de no llevar protección ocular? En Vagaluz os hablamos hoy de la conveniencia de las gafas de sol para niños y os damos las claves para elegirlas.

1. Importancia de la prevención ocular

¿Sabes que el 80% de la radiación que se acumula en los ojos de los niños sucede antes de los 18 años? Según los estudios realizados los rayos ultravioletas son muy perjudiciales en los ojos de los pequeños, que son más vulnerables al no estar todavía desarrollados.

• ¿Cuáles pueden ser las consecuencias?: la exposición inadecuada puede derivar en enfermedades oculares futuras, como por ejemplo las cataratas, alteraciones de la córnea o quemaduras en la retina.

• ¿En qué época del año hay que proteger los ojos?: especialmente en verano, cuando el nivel de rayos ultravioletas es mucho mayor que en invierno, y además los pequeños pasan más tiempo al aire libre.

• ¿A qué edad hay que empezar a utilizar gafas de sol?: cuánto más pequeños sean los niños, más vulnerables son sus ojos a los rayos del sol.

2. Las gafas de sol no son solo para adultos

Tenemos que desterrar la idea de que las gafas de sol son solo para adultos y habituar a nuestros pequeños a utilizarlas ya sea para salir a la montaña, ir a la playa o a la piscina. Además, en la época invernal, para todos aquellos que seáis aficionados al esquí –ya os hablamos en Vagaluz de las estaciones ideales para esquiar en familia- debéis tener en cuenta que la nieve refleja el 80% de la luz solar por lo que es muy importante proteger los ojos de vuestros hijos.

3. Claves para elegir las gafas de sol para niños más adecuadas

• Deben estar homologadas y llevar la marca de la CE (Comunidad Europea). Además, deben reflejar el número de categoría de filtro.

• No debéis comprar nunca las gafas en un mercadillo o establecimientos que no sean una óptica, ya que es el único lugar en el que garantizan al 100% que las gafas cumplen los requisitos de calidad.

• Filtros o niveles de protección: la normativa de la CE establece cinco filtros del 0 al 4, siendo el 3 el más habitual. En este sentido, en la óptica podéis decirle cual va a ser su uso y os recomendarán las más adecuadas.

• Consensuar con vuestros hijos el modelo que más le gusta –hoy en día hay infinidad de colores y formas- pero siempre estando atentos a que cumplan los requisitos anteriores.

• Utilizar estuches resistentes para guardarlas, ya que si rayan la lente puede bajar su eficacia.

Así que ya sabéis al igual que ahora comenzáis a comprar los bañadores y bikinis para la temporada estival, ¡no os olvidéis incluir en vuestra lista unas buenas gafas de sol!