Cómo enseñar a un niño a vestirse solo

Estáis acostumbrados a vestirle todas las mañanas, pero os encantaría que vuestro hijo aprendiera a vestirse solito. De esa forma, podríais aprovechar ese tiempo para rematar otras tareas, y él se sentiría un poquito más mayor y más responsable.

Alrededor de los dos años, el niño ya está preparado para arreglarse solo, y es importante que le permitas intentarlo en cuanto veas que se muestra dispuesto a ello. Al principio, lo mejor es que lo haga con tu ayuda y bajo tu supervisión, pero poco a poco puedes ir dejando que se encargue él de todos los detalles.

En Vagaluz te mostramos cómo puedes enseñar a tu hijo a vestirse solo a partir de los dos años.

5 trucos para enseñar a tu hijo a vestirse solo

1. Déjale escoger qué ponerse. Lo mejor, para que se tome el momento de vestirse como algo positivo, es permitirse escoger a él o a ella la ropa que se va a poner. A los niños les encanta ponerse polos que les recuerdan a los de sus padres, como éste de La Ormiga y a las niñas les vuelven locas los vestidos con volantes, que les hacen sentirse parte de un cuento, como éste de La Amapola.

1. Hazle sentirse bien con sus avances. Cada vez que logre abrochar un botón él solito, colocarse bien el cuello, o ponerse una prenda sin ayuda, no dudes en decirle que lo está haciendo muy bien. De este modo, lograrás un refuerzo positivo y se sentirá más motivado y con más ganas de intentarlo.
2. No le metas prisa. Si es necesario, levantaros un poco antes, pero no le metas prisa porque al principio necesitará su tiempo. Ya lo dice el refrán: “Vísteme despacio, que tengo prisa”.
3. Cómprale ropa fácil de poner y de quitar. Para hacerle este reto un poquito más sencillo, lo más adecuado es que le compres ropa fácil de poner, por lo menos al principio. De lo contrario, será más fácil que se desanime y que deje de intentarlo. Te recomendamos ropa con pocos botones, como este polo de La Ormiga o este vestido de Nanos.

1. Marca una rutina. Enséñaleque cada mañana, después del aseo, la primera tarea que debe hacer cada día es vestirse. Establece una rutina y vigila que se cumple cada día, para que aprenda a coger unos hábitos y le resulte más fácil hacerlo, cada día, de forma casi automática.