¿Son buenas para los niños las zapatillas con ruedas?

No es extraño que, paseando, nos encontremos con niños deslizándose sobre sus talones gracias a las conocidas zapatillas con ruedas. Probablemente esta moda se haya extendido a tus niños o a sus compañeros en el colegio, que ven divertido y práctico el hecho de avanzar más deprisa con este tipo de zapatos.

Sin embargo, como ocurre con otras tantas modas, los efectos que tienen estas zapatillas sobre el pie de los niños y su crecimiento eran desconocidos hasta hace unos meses. La voz de alarma la ha dado Roberto Pascual, profesor de la Universidad Miguel Hernández en Elche y experto en Podología Infantil, quien ha estudiado cómo estas zapatillas influyen sobre la salud infantil. Estas son las conclusiones que ha sacado:

La opinión de los podólogos sobre las zapatillas con ruedas

El Consejo General de Colegios Oficiales de Podólogos de España (CGCOPE) se ha hecho eco de este estudio y ha alentado a los centros escolares que prohíban el uso de las zapatillas con ruedines. Dentro del estudio, el 11% de los niños participantes (sobre todo niñas) iba a clase con los zapatos con ruedas o heelys.

“Esto no es un calzado sino un juguete y se debería comercializar en todo caso en jugueterías y no en zapaterías”, afirma Roberto Pascual. Su aspecto en forma
de calzado deportivo esconde el foco de problemas que pueden surgir al darles un uso continuo y a largo plazo:

• Pesan el doble que unas deportivas típicas.
• No tienen flexibilidad en la suela como un calzado normal.
• Los ruedines generan inestabilidad.
• El tacón tiene una altura excesiva, lo que puede llegar a aupar el pie 5 centímetros más alto que las deportivas al uso.

Según el CGCOPE, cuando estamos descalzos, el 75% del peso lo soporta el talón, mientras que el antepié soporta el 25%. El estudio de Pascual determinó que los heelys provocan una sobrecarga en el antepié de un 20% en posición normal y, con la rueda fuera, de un 40%. Esto equivale a andar constantemente sobre un tacón de 4 o 5 centímetros, cuando lo recomendable es que el calzado infantil sea plano.

¿Qué hacer? Consejos para cuidar los pies de los pequeños

La principal conclusión a la que llega la CGCOPE sobre los heelys es que los niños no deberían usarlos más de una o dos horas por semana y, en ningún caso, en el colegio ya que son jornadas largas y activas.

Más allá del caso particular de las zapatillas con ruedas, los podólogos destacan que “la elección del calzado es un factor fundamental, especialmente para niños de 1 a 8 años (desde que se empieza a calzarlos hasta que se ha producido el desarrollo del 80% de la evolución del pie).”

Por ello, algunos de los consejos para cuidar los pies de los niños son:

• Evitar comprar zapatos más grandes para que “les duren más”.

• No “heredar” zapatos, ya que cada pisada es diferente y un zapato utilizado por otros niños puede modificarla.

• Elegir calzado de la talla adecuada. Para ello, recomiendan medir el pie y el interior del zapato. Algunos zapatos incluyen una plantilla que vale como modelo, pero si no, la CGCOPE indica que la mejor manera es: “poner un folio en el suelo, hacer pisar al niño con el pie descalzo, poniéndose de puntillas y luego bajando. Se marca con un lápiz en la punta del dedo más largo y en el talón. Se mide con una regla y a la medida del pie mayor hay que sumarle 1 cm”. Una vez en la zapatería, solo hay que comprobar con un metro que el interior cuenta con los centímetros adecuados.  

• Los zapatos no deben comprimir el empeine, sino que deben ser flexibles.

• Escoger mejor zapatillas fabricadas con fibras naturales como piel o algodón, para que sean transpirables.

• La suela debe ser antideslizante y plana. En cuanto al grosor, evitar las completamente finas y las excesivamente rígidas.

• Primar los zapatos con algún tipo de sujeción (velcro, hebillas, cordones) para que el pie no haga sobresfuerzos al caminar.